Hoy te busqué en los lugares que fueron.
Y te busqué dentro, en el hueco -tan, tan grande-
que tuviste, que dejaste.
No te encontré.
Sólo queda, aún, aquél que resultó no ser.
Y qué triste y qué pobre resultas bajo mi luz blanca
Y qué triste y qué pobre resultas bajo mi luz blanca
Hace ya tiempo que te fuiste.